El coronavirus añade incertidumbre a la automoción en plena transición energética

Un estudio elaborado por Ultima Media ha alertado de las consecuencias que generará la implementación de nuevas medidas restrictivas para la contención del coronavirus en la industria automovilística europea. Según este informe, la industria del automóvil verá decrecer sus resultados en 2020 entre el 2 y el 15% respecto al ejercicio pasado. Así, la pandemia generada por el coronavirus se ha sumado como factor desestabilizador y freno al crecimiento del sector, y se ha sumado a la incertidumbre que ya de por sí provoca la transición energética y los ambiciosos objetivos en la reducción de emisiones del transporte por carretera.
La propagación del coronavirus ya ha provocado importantes perturbaciones en la industria automotriz china y mundial. La enfermedad ha seguido propagándose y los gobiernos han decidido tomar medidas cada vez más severas para contenerla, la consultora Ultima Media ha decidido realizar un estudio para dilucidar cuál será el impacto que tendrá esta crisis sanitaria en la industria del automóvil europea. En este sentido, el informe destaca tres posibles escenarios de impacto en la producción y ventas de los vehículos, pero en los tres casos analizados prevé una caída en las cadenas de suministro y operaciones logísticas en el sector automovilístico.
Los efectos se sentirán en la industria debido a las limitaciones logísticas en China y la cuarentena en Italia
Según destaca la consultora, “los efectos se sentirán en la industria debido a las limitaciones a la cadena de suministro y la logística en China, pero también por la cuarentena en Italia”. En los dos últimos meses, la producción y las ventas ya se han visto severamente afectadas en importaciones y exportaciones debido a las restricciones en la movilidad. En Europa, los fabricantes españoles, italianos y alemanes han sufrido debido a la escasez de productos provenientes desde China, e incluso la automovilística FCA se ha visto obligada a suspender su producción en Serbia durante varias semanas. Hasta la fecha, “las cadenas de suministro europeas se han mostrado resilientes”, destaca el estudio. No obstante, esta situación podría empeorar en el caso de que “otros países europeos decidan imponer las mismas medidas que el Gobierno italiano”.
Antes de la proliferación del coronavirus, Ultima Media había previsto una caída de las ventas en el 2% en 2020, en comparación al ejercicio anterior debido a la incertidumbre económica global y las restricciones en la reducción de emisiones. En cambio, tras el impacto del coronavirus, la consultora ha destacado que las ventas podrían variar de casi 470,000 a más de 2,5 millones de unidades en el Reino Unido y la Unión Europea en 2020. En cuanto a la producción, pronostica unas pérdidas de entre 450.000 y casi 2 millones de unidades.
Además, en el caso de imponer nuevas restricciones, “el impacto podría ser incluso mayor”, ha alertado. En el mejor de los casos, el informe apunta a una caída del 2,5% en la producción respecto a las predicciones de 2020. No obstante, en el peor de los casos, Ultima Media advierte de un posible decremento hasta del 15%. “Una pandemia global podría generar nuevas restricciones e interrupciones en la cadena de suministro de la industria, en cuyo caso sería más probable que estos resultados fuesen incluso más negativos”, ha puntualizado.
Respecto a los fabricantes de automóviles, BMW ha sufrido cierres en sus fábricas ubicadas en China en febrero, aunque actualmente su producción ha vuelto a la normalidad. También Daimler y Mercedes-Benz han reiniciado su producción en China, y hasta la fecha, su negocio no ha sufrido un impacto en el mercado europeo ni global tanto a nivel de pasajeros como vehículos comerciales. FCA es la compañía que más ha sufrido esta crisis, pues varias de sus plantas han tenido que cerrar debido a la cuarentena italiana. Asimismo, Ultima Media ha apuntado que PSA también se ha enfrentado a un cierre prolongado en sus plantas de Wuhan (China), que eventualmente “podría afectar su producción a nivel internacional”. En el caso de España, están en estudio cierres parciales de actividad en diversas plantas de producción de vehículos.