Los puertos de Tenerife acuerdan limitar la contaminación atmosférica y acústica

La Autoridad Portuaria de Tenerife acuerda una ordenanza para limitar la contaminación atmosférica y acústica que se produce en sus instalaciones. La norma, recién aprobada por el consejo de administración, entrará en vigor a finales de este año y afectará a los atraques de buques de línea regular, a las operaciones de carga y descarga de mercancía y a las operaciones terrestres realizadas en terminales portuarias. “Tenemos claro que el camino hacia la sostenibilidad de la actividad portuaria”, ha declarado el presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife, Carlos González, “y la integración puerto-ciudad pasa necesariamente por abordar el reto de la contaminación atmosférica y acústica, con iniciativas que redundarán en el bienestar de la ciudadanía y de las que esta nueva norma es un ejemplo”.
La nueva norma obligará a los buques de pasaje a conectarse a la red en muelles donde esté disponible el sistema de suministro de electricidad. En su caso, los puertos de Santa Cruz de Tenerife, La Palma y La Gomera ya ofrecen este servicio durante su estancia en puerto, especialmente en horario nocturno. Sin embargo, como aún no todas las unidades disponen de dicha prestación, la autoridad portuaria asignará un atraque más alejado del centro de la ciudad. Por otro lado, la ordenanza contempla la conexión de los contenedores con carga refrigerada en terminales de mercancía o mixtas dotadas del servicio.
La autoridad portuaria adjudicó el contrato de obras de refuerzo y habilitación de la 1ª alineación del Dique del Este
Al mismo tiempo, los contenedores reefer no podrán acceder a la terminales antes de que se cumplan 24 horas para su embarque. En la operativa contraria, la autoridad portuaria solo permite la permanencia de contenedores refrigerados en puerto durante la noche si deben pasar inspección aduanera o sanitaria al día siguiente y si la terminal no ofrece conexión eléctrica. Respecto al control del ruido, los puertos tinerfeños regularán el nivel sonoro de las alarmas provenientes del movimiento de la maquinaria que manipula las mercancías en tierra. De esta manera, la autoridad portuaria insta a buscar un equilibrio en que estas operativas sean perfectamente audibles y que causen la mínima molestia a personas ajenas a la ejecución de maniobras.
Además de la aprobación de esta normal, la autoridad portuaria ha adjudicado a Eneas Servicios Integrales el contrato de obras de refuerzo y habilitación de la primera alineación del Dique del Este, situado en el puerto de Tenerife. La compañía contará con un presupuesto de 2,7 millones de euros y deberá finalizar las actuaciones en un plazo máximo de doce meses. En concreto, las obras se dirigen al tramo entre la rampa Ro-Ro de la primera alineación del Dique del Este y su intersección con la segunda alineación, que se extiende hasta los 150,56 metros. Además, se sustituirán los bolardos actuales por otros con una capacidad de hasta 150 toneladas y se construirá una estructura de hormigón que posibilite la operación de grúas móviles sobre orugas con una capacidad de elevación de 600 toneladas.