Los cargadores confían en afinar procesos para evitar ineficiencias operativas en la carga y descarga

La entrada en vigor hoy de la prohibición de la realización de la carga y descarga de mercancías por parte de los conductores de camiones de más de 7,5 toneladas de masa máxima autorizada (MMA) puede conllevar algunas ineficiencias, según han reconocido fuentes cercanas a los cargadores. Por ello, el secretario general de la asociación de empresas cargadoras Transprime, Jordi Espín, ha afirmado que “el buen entendimiento entre cargadores y sus clientes es necesario para adaptarse al nuevo escenario”. En este sentido, Espín ha indicado que es “importante evitar solapamientos operativos y, en ello, el diálogo logístico es básico para que los nuevos procesos incorporen los requisitos de la nueva normativa”. También la secretaria general de la Asociación de Cargadores Españoles (ACE), Nuria Lacaci, ha apuntado que puede “haber un incremento de coste de manera transitoria por la posible pérdida de eficiencia durante el periodo de adaptación del personal encargado de estas operaciones”.
Acerca de esta cuestión de la carga y descarga, el consejero delegado de la empresa de consultoría logística Aglaë Ekosystem, Carlos Hernández Barrueco, ha señalado como cambio importante “el del dimensionamiento”. A su juicio, “no es lo mismo tener a 30 conductores cargando o descargando simultáneamente que tener que hacerlo con medios propios y tener picos y valles de trabajo”. Hernández Barrueco sostiene que si el “departamento de Logística o Almacén no sabe organizar adecuadamente sus ventanas horarias, puede colapsar totalmente, ya que con poco personal y muchos picos se originan colas y esperas de muchísimas horas”.
Para el vicepresidente ejecutivo de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic), Ramón Valdivia, no cabe duda “de que habrá fricciones y malentendidos que aclarar tanto en la relación laboral del conductor con su empresa como en los puntos de carga y descarga de los clientes”. La intervención directa del conductor, ha añadido, “es una práctica que había tenido un crecimiento desmedido y esta nueva norma supone una fractura en un comportamiento habitual y eso siempre trae turbulencias”. En todo caso, “esperemos que sean pocas y rápidamente aterricemos en el nuevo escenario que se está buscando de mayor equilibrio entre las partes”, ha manifestado Ramón Valdivia. Asimismo, el secretario general adjunto de la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), Dulsé Díaz, ha afirmado que los cambios “importantes llevan un tiempo de prueba y reflexión”, pero “estaremos atentos para que su puesta en marcha sea fiel al espíritu de lo acordado o exigiremos su adaptación”.
“La nueva medida tendrá un coste extra para el cargador sin poder bajar el precio al transporte”
Carlos Hernández Barrueco Consejero Delegado de Aglaë Ekosystem
En cuanto al coste de la implantación de la normativa, Nuria Lacaci no considera “que vaya a haber un extracoste”. Según defiende la la secretaria general de la Asociación de Cargadores Españoles (ACE), “la carga y descarga se abonaba a la empresa de transporte, cuando era el conductor el que la realizaba y, a partir de ahora, ese importe se le detraerá al transportista y se gastará en retribuir al nuevo personal contratado”. Sin embargo, Hernández Barrueco no es de la misma opinión y sostiene que, aunque “no es nada serio, podríamos decir que, en los sectores afectados, esta medida puede suponer entre el 2% y el 5% de extracoste, ya que el transportista ofrecía este servicio incluido en su precio y ahora le toca asumirlo al cargador, sin que pueda bajar el precio al transporte”. Asimismo, ha apuntado que el sector “está en plena etapa de alza de precios, lo que supone que el transportista no solo no acepte cualquier bajada, sino que, además, intentará trasladar subidas por esperas”.
“La diferenciación y separación de procesos implica inevitablemente la contratación de personal para las labores de carga y descarga”, ha constatado Jordi Espín (Transprime), y se trata de una consecuencia que han tenido que abordar todos los cargadores. En este sentido, Nuria Lacaci (ACE) ha indicado que las empresas “están contratando o reubicando personal para la realización de las labores de carga y descarga en almacén, en punto de venta o en ambos”. Además de la contratación, Jordi Espín ha subrayado, entre las soluciones adoptadas para abordar la nueva normativa, “la revisión de los acuerdos de colaboración con clientes y proveedores, cambios contractuales, de procesos y de alertas logísticas para desplegar la pedagogía necesaria en la adaptación al nuevo paradigma”. Por su parte, Nuria Lacaci explica que no hay “modificaciones operativas, aunque sí necesidades específicas”, porque “la reubicación de personal propio hace necesaria una labor formativa previa”.
“La interpretación no es sencilla y algunas cuestiones las tendrán que decidir los tribunales”
Nuria Lacaci Secretaria general de la Asociación de Cargadores Españoles (ACE)
En este sentido, Carlos Hernández Barrueco ha afirmado que las “principales soluciones que se están aplicando pasan por contratar más personal propio, externalizar este servicio a un operador y contratar servicios de consultoría externa para analizar la estiba, carga, embalado y descarga adecuada”. De hecho, en Aglaë Ekosystem “estamos teniendo un boom de peticiones de fichas de estiba, formación y embalaje, por ejemplo”, ha corroborado su consejero delegado. Asimismo, ha señalado que se “están cambiando las máquinas para operar con carretillas o transpaletas más potentes”. Respecto a los equipos de manutención e intralogística, Nuria Lacaci ha señalado que “normalmente los cargadores ya disponían de los medios necesarios, por lo que no ha resultado necesario comprar materiales o equipos”.
MAYOR CLARIDAD Y MÁS PARTICIPACIÓN DE LOS CARGADORES
En cuanto a la claridad de la nueva normativa, la secretaria general de la Asociación de Cargadores de España ha afirmado que la “interpretación de la norma no es sencilla y habrá cuestiones sobre las que tendrán que decidir los tribunales”. Mientras se genera jurisprudencia, ha añadido Nuria Lacaci, “cargadores y transportistas trabajaremos en un escenario un poco borroso”. Por el contrario, el consejero delegado de Aglaë Ekosystem, Carlos Hernández Barrueco, considera que las normativas “son de las más claras y específicas que se han desarrollado en España en esta materia”. De hecho, ha recordado que “llegan a un punto en el que especifican las responsabilidades por tipo de puesto de trabajo o por sector de transporte afectado”. En todo caso, Hernández Barrueco ha matizado que siempre “hay detalles que la normativa es difícil que refleje”.
“Hay temas pendientes que no deberían conducirse eliminando a los cargadores como interlocutores”
Jordi Espín Secretario general de Transprime
Desde Transprime, su secretario general de Transprime ha destacado que la norma “debería pacificar la cadena de suministro tal y como está redactada hoy”. Ahora bien, Jordi Espín ha lamentado que las empresas cargadoras “no hayan formado, hasta hoy, parte de la negociación para evitar problemas de implantación y de clarificación de procesos”, aunque se ha mostrado confiando en que “todos los actores observarán la mejor versión interpretable de la normativa para evitar conflictos”. A este respecto, ha recordado que quedan “temas pendientes de desarrollo del Real Decreto Ley 3/2022 del mes de marzo que no deberían conducirse de la misma manera que hasta hoy, eliminando a los cargadores como interlocutores esenciales y necesarios para afrontar el futuro operativo inmediato”.